En la actual generación de guerras de consolas, mucho depende de los servicios de suscripción de Sony y Xbox, quizás más que nunca. Esta suposición es confirmada por ambas compañías que recientemente reestructuraron PlayStation Plus y Game Pass, y algunas presentaciones ante la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. (SEC) lo hacen aún más convincente.

En septiembre, Snail Games (un desarrollador y editor independiente mejor conocido por Ark: Survival Evolved) presentó un formulario S1 ante la SEC: declaración de registro para empresas privadas que planean salir a bolsa. Snail afirma que en 2021 la gran mayoría de sus ingresos provinieron de ventas digitales a través de plataformas online como Steam, Xbox Live y PlayStation Network.

Sin embargo, lo que llama más la atención en la presentación es que Sony pagó $3,5 millones de dólares en noviembre de 2021 para que Ark fuera gratuito para los miembros de PlayStation Plus durante cinco semanas. El contrato estipulaba que el juego debía cumplir ciertas “obligaciones de desempeño”, en particular “debe generar un cierto número de descargas para recibir la cantidad total estipulada en el contrato”. El período gratuito para suscriptores comenzó el 1 de marzo de 2022 y Snail afirmó que cumplió con sus obligaciones desde el primer día.

Sony pagó US$3,5 millones sin nada a cambio más que la esperanza de que el juego ayude a retener a los suscriptores actuales y tal vez atraiga a un “par” de nuevos. Sin embargo, la empresa no es la única que desembolsa el privilegio de ofrecer Ark a los clientes de forma gratuita.

Microsoft celebró un acuerdo de licencia con Snail en 2018 para ofrecer el juego en Game Pass. Snail no mencionó las ganancias de años anteriores, pero señaló que Ark 1 ganó $$2,5 millones solo en los dos primeros trimestres de 2022. El editor también recibió otros $$2,3 millones de Xbox este año, designados como "ingresos diferidos". " para Ark 2, que se lanzará el próximo año.

Y estos son números para un solo juego: Sony ofrece hasta 5 juegos gratis por mes a los suscriptores de PS Plus. Según los datos de Ark, Sony gasta entre 7,5 millones de dólares y 17,5 millones de dólares al mes para mantener contentos a los suscriptores de PS+.

Sony y Microsoft gastan millones de dólares al mes en juegos que no les generan ingresos directos, confiando así en el servicio de suscripción para garantizar que los beneficios derivados de estos privilegios no sólo se mantengan, sino que también se disparen.

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